Sabrina y sus tías se van de vacaciones a Hawai, en donde a Sabrina se le da la última pista del secreto de la familia y un ultimátum para poder resolverlo. Al final, Sabrina logra resolverlo: cada miembro de los Spellman nace con un gemelo. Pero luego sus tías le advierten que uno de los gemelos es malvado, por lo que Sabrina tiene miedo de que su hechizo egoísta la convierta directamente en la gemela malvada.