Un viejo granjero y su esposa son salvajemente asesinados en un lugar aislado del sur de Suecia. La policía está desorientada, pues no parece que haya ningún móvil. La única información de la que disponen es que los culpables no tuvieron reparo en utilizar los más sádicos y violentos métodos. El trabajo del detective Wallander, responsable de la investigación, no será nada fácil. Por si fuera poco, al mismo tiempo, un centro cercano de refugiados sufre una serie de ataques, que culminarán con la muerte de un refugiado somalí.