Tras una reorganización del gabinete, Julius Nicholson, un asesor externo, llega para investigar las políticas de todos los departamentos principales. Tucker está indignado y considera que su trabajo es obstruir. Al enterarse de que la esposa del primer ministro es conocida por su aversión hacia él y con su aparición en 'Question Time' fracasada, Hugh intenta ablandar a la prensa organizando una fiesta, solo para descubrir que Nicholson está haciendo lo mismo. Este realmente es el momento para que Tucker comience esos susurros chinos y acabe con Nicholson.